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Parral despide a “La Chica Fresa”, ícono de la afición beisbolera

Hidalgo del Parral, Chih.- La comunidad parralense se encuentra de luto tras el fallecimiento de Alfonso Ortiz Acosta, mejor conocido como “La Chica Fresa”, figura entrañable del ambiente deportivo local y alma de la porra oficial de los Mineros de Parral.
La noticia de su muerte, ocurrida durante la madrugada del pasado domingo de manera repentina, ha causado profunda conmoción entre aficionados, amigos, familiares y autoridades deportivas, quienes no han cesado de expresar su pesar a través de redes sociales y actos conmemorativos.
Alfonso Ortiz, aunque no era jugador, fue durante más de una década el corazón de las gradas en el Gran Estadio de Béisbol de Parral. Su entusiasmo contagioso, sus disfraces coloridos, su peluca, silbato y energía inagotable lo convirtieron en un símbolo del folclor deportivo regional, amado por generaciones de fanáticos.
Además de su pasión por el béisbol, “La Chica Fresa” fue un activo participante en eventos sociales, escolares y comunitarios, consolidándose como una figura alegre, solidaria y profundamente comprometida con su ciudad.
Homenaje en el diamante
El pasado martes, familiares, amigos y autoridades deportivas se reunieron en el estadio para rendir un emotivo homenaje póstumo. En una escena que estremeció a los asistentes, el féretro fue colocado en el centro del diamante, el mismo donde tantas veces animó a los Mineros con fervor desbordado.
La ceremonia inició con canciones que Alfonso solía cantar con alegría, como Copa sin vino y El Columpio, seguidas de un minuto de aplausos que rompió el silencio y llenó las gradas de nostalgia.
El momento más conmovedor llegó con el Himno de los Mineros, entonado por la porra entre lágrimas, no como aliento para una remontada, sino como un canto de despedida para uno de los suyos.
“Era como el bateador número once”, compartieron los porristas, rememorando sus apariciones inesperadas a media entrada, cuando el ambiente se encendía y la afición cobraba nueva vida.
Un legado que vivirá en el estadio
Javier Loya, jurisdiccional de la IV Zona de Béisbol de Parral, reconoció el impacto de Ortiz Acosta en el ánimo del equipo:
“Poncho era un ícono. Para mí, muy importante porque prendía a la gente, motivaba al equipo, le daba vida al estadio. Me duele mucho su partida”.
Como tributo permanente, se anunció que durante toda la temporada actual la pizarra del estadio mostrará la leyenda “1968–2025”, en honor al año de nacimiento y muerte de “La Chica Fresa”.
Más que un fanático, un símbolo de identidad
Alfonso Ortiz Acosta no fue un jugador profesional, pero su legado trasciende cualquier marcador. Fue un animador, un amigo, un referente de identidad popular, que hizo del estadio un espacio de alegría, unidad y comunidad.
Hoy el béisbol parralense pierde a una de sus voces más auténticas, pero en cada porra, en cada silbato, en cada jugada, vivirá el espíritu incansable de “La Chica Fresa”.
